Este híbrido nace como resultado de cruzar una sativa pura nepalí cuidadosamente seleccionada de entre miles de individuos, con una de nuestras mejores índicas: la Black Domina.
Este híbrido nace como resultado de cruzar una sativa pura nepalí cuidadosamente seleccionada de entre miles de individuos, con una de nuestras mejores índicas: la Black Domina.
El resultado es una planta de tamaño mediano, que mezcla a la perfección las mejores cualidades de los dos fenotipos índica-sativa.
Una planta que se recubre de cúmulos de flores, recubiertas a su vez de cristales de resina. Su olor acaramelado recuerda a los mejores charas nepalís, su efecto es embriagador y está lleno de misticismo.